Recuerda a un lápiz tradicional. Sin embargo, Noris digital jumbo de Staedtler es un lápiz para tomar notas, pintar o resaltar un texto en nuestros dispositivos móviles y portátiles con pantalla táctil. Lo hemos probado.
Nos hemos acostumbrado a vivir rodeados de pantallas táctiles. Aunque tradicionalmente hemos interactuado con ellas aplicando ‘pequeños toques’ sobre su superficie, la llegada de los lápices digitales ha supuesto toda una revolución al ofrecer una experiencia renovada cuando tenemos que relacionarnos con nuestro teléfono móvil o tableta. También con los portátiles provistos de una pantalla que es sensible al tacto. Uno de estos lápices es el nuevo modelo digital jumbo de Noris (marca del fabricante de material de escritura, dibujo y productos creativos Staedtler) que este año conmemora su 120 aniversario.
Nada más sacarlo de su caja, la impresión que transmite es que se trata de un lápiz al uso. Con unas dimensiones de 140 x 9,1 mm se siente muy ligero (pesa 10 gr). Tiene, además, un diseño triangular y en su fabricación se ha empleado WOPEX, un material obtenido a partir de la madera y que se caracteriza por ser respetuoso con el medio ambiente.
Enseguida se siente cómodo porque lo agarras con absoluta naturalidad, resultando, como a continuación veremos, un accesorio idóneo tanto para el público adulto como juvenil y niños porque puedes tomar notas y apuntes, resaltar un texto con las ideas más importantes, dibujar y pintar...
Lo que le hace especial (aquí descubrimos una de las principales diferencias con respecto a su antecesor el lápiz Noris digital) es que en la parte superior, en color rojo, incorpora una goma de borrar digital: la mecánica es sencilla, pues solo necesitamos colocarla en la superficie de nuestro dispositivo y hacerla girar para extraerla y poder borrar. Mientras, en el extremo contrario, está la punta del lápiz. Soporta hasta 4.096 niveles de presión y posee un grosor de 0,7 milímetros. El fabricante ha incluido cinco puntas de recambio más una pequeña herramienta circular hecha en metal que facilita el intercambio de una punta por otra. Parece complicado, pero cuando lo haces rápidamente compruebas que todo es bastante intuitivo.
¿Cómo se usa Noris digital jumbo? Tienes que saber varias cosas. La primera es que funciona de manera independiente, es decir, no necesita ninguna pila o batería, por lo que siempre está listo para utilizarse. La segunda es que no es necesario descargarse ningún controlador o emparejarlo con nuestro dispositivo. Sin duda, ambas ventajas son muy importantes.
La tercera, y última, es que incorpora una tecnología de resonancia magnética (patentada por la firma Wacom) llamada EMR gracias a la cual nuestro portátil, teléfono móvil o tableta lo reconoce en el instante en que la mina toca la pantalla. A este respecto, Staedtler pone a disposición de los usuarios un link donde recopila un amplio listado de dispositivos compatibles con EMR.
Nosotros lo hemos probado con la tableta Samsung Galaxy Tab S6 Lite y la experiencia ha sido buena y, sobre todo, muy natural porque te recuerda en todo momento a los lápices normales. Asimismo, su ergonomía refuerza la sensación de comodidad y que la mano no se canse; incluso si tenemos que estar delante de la pantalla mucho tiempo gracias a que detecta cuando la palma de nuestra mano se apoya sobre la pantalla.
El lápiz Noris digital jumbo se puede utilizar, entre otras, con las apps Samsung Notes, Microsoft One Notes Bamboo Paper, Adobe Photoshop Sketch, Squid, Kami… Esta versatilidad le convierte, por tanto, en una opción interesante para distintos perfiles de usuario. En el caso de los estudiantes, se trata de un accesorio que facilitará las horas de estudio al organizar apuntes que luego pueden compartir, resaltar los puntos claves de un texto que tienen que trabajar, realizar anotaciones en documentos PDF…
Regina de Miguel
Mandela dijo: “La educación es el arma más poderosa que existe para cambiar el mundo”. Ilusionada de formar parte de un proyecto que sí quiere cambiar las cosas y con el que descubro experiencias que no dejan de sorprenderme.
