Las mascarillas más ‘tech’ para protegerse del coronavirus
Gracias a diferentes avances tecnológicos y sensores, realizan un seguimiento de la calidad del aire que el usuario respira o se desinfectan solas.
El uso de mascarilla es obligatorio en espacios públicos, aulas y en todos aquellos sitios en los que no se pueda respetar la distancia de seguridad. Higiénicas, quirúrgicas, EPI… existen varios tipos de mascarillas pero, ¿sabías que también hay modelos que emplean la tecnología para mejorar su eficacia? Estas son algunas de las más interesantes.
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BioVYZR 1.0
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Con el objetivo de ofrecer una mayor protección para los más vulnerables, se ha diseñado en Canadá este escudo protector que rodea la cabeza y parte del torso. Con un diseño futurista, tiene un sistema en la espalda donde va la batería y un purificador con filtros KN95 que filtran el aire del interior y elimina patógenos, alérgenos y otras partículas. Se ajusta con un chaleco de neopreno y dos correas laterales y pesa 2,25kg. Otro detalle que han tenido sus diseñadores es la incorporación de unos guantes reversibles para que el usuario pueda meter la mano dentro del escudo y tocarse la cara sin miedo a contagiarse.
Cliu Pro
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Es transparente, ‘eco-friendly’ y dispone de múltiples funciones: micrófono incorporado, Bluetooth y sensores que permiten comprobar a través de su propia app móvil la calidad de la respiración, la frecuencia cardíaca, el uso de los filtros o el estado de la batería. La parte frontal se puede abrir y cerrar gracias a una cerradura magnética en caso de querer beber o comer sin tener que retirar la mascarilla. Cuenta con un sistema antivaho para una comunicación cómoda y segura y sus filtros de carbón activo protegen al usuario de virus, contaminación y polen. Para el proceso de autodesinfección se conecta a una lámpara UV que a su vez carga el gadget.
Colorprint fashion
El tejido de esta mascarilla cambia de color verde a blanco cuando alcanza una temperatura aproximada de 37,5ºC. De este modo, alerta al usuario cuando tiene fiebre, con el objetivo de controlar la transmisión y reducir el contagio del virus. Con una filtración bacteriana del 98%, el tejido ha sido homologado para su uso en mascarillas higiénicas por el Instituto Tecnológico del Textil (AITEX), certificando su durabilidad y su efectividad frente a la prevención de la Covid-19. Además, también se han fabricado pulseras con este tejido inteligente que pueden resultar de gran utilidad en el seguimiento de los niños en las aulas.
CSIC Bioinicia
Diseñada por investigadores del Consejo Superior de Investigadores Científicas (CSIC) junto con Bioinicia, se trata de la primera mascarilla que se hace en España que incorpora un filtro de nanofibras con la capacidad de filtración mecánica. José María Lagarón, jefe del equipo de investigación, explicaba en una entrevista en RTVE que esta filtración funciona como una red de tenis que no deja pasar las pelotas (que serían los aerosoles), porque el tamaño del poro es extremadamente pequeño. Son más finas, ligeras y disipan mejor el calor y también tienen más durabilidad porque la filtración es permanente, por lo que ‘agobian’ menos.
Flat Tube Energy
Diseñada por la Universidad Miguel Hernández de Elche y creada con una impresora 3D, este prototipo es capaz de eliminar el virus mientras el usuario respira gracias a una cortina láser UV-C. Para ello, se basa en una tecnología ultravioleta de baja frecuencia que se emite por diodos láser dirigidos. Según los expertos, la luz UV-C lejana tiene una longitud de onda que se sitúa entre los 207 y los 222 nanómetros y posee la capacidad de inactivar algunos patógenos de transmisión aérea, como el coronavirus, sin poner en peligro la salud humana. Además, tiene una autonomía de 10 horas y se recarga al igual que un dispositivo móvil.
LG Puricare
Esta mascarilla es en realidad un purificador de aire portátil que estará disponible a partir del cuarto trimestre del año en algunos países. Está fabricado al 100% con materiales reciclables e incorpora dos filtros reemplazables del tipo H13 HEPA que permiten que el dispositivo suministre aire fresco y limpio tanto en el interior como en el exterior. Un sensor respiratorio detecta el ciclo y el volumen de la respiración del usuario y ajusta la velocidad de los ventiladores para respirar de forma óptima. En cuanto a su autonomía, en modo bajo funciona durante hasta ocho horas y en modo alto, hasta dos.
Narvalo Mask
Sus creadores aseguran que tiene una protección del 99,9% frente al virus. Es transpirable, ergonómica y se puede lavar, equivaliendo a una mascarilla con una seguridad FFP3 gracias a su capa de carbón activo. La válvula de exhalación maximiza la salida del aire y evita que se acumule demasiado calor o humedad. Está disponible a través de la web del fabricante en seis colores diferentes y cada máscara lleva dos filtros Narvalo que tienen una duración de un mes. Además, se puede conectar al móvil a través de una aplicación para recibir información sobre la calidad del aire.
N95 Xiaomi
Transparente, con luz ultravioleta y puerto USB, cuenta con respiradores a ambos lados que filtran el 95% de las partículas en suspensión del aire e impiden que salgan partículas de la respiración al exterior. Al conectar el dispositivo a una fuente de alimentación a través del puerto USB, la luz ultravioleta procede a autodesinfectar el interior de la mascarilla; un proceso que dura alrededor de diez minutos. Sin embargo, será necesario que el usuario se encargue de la desinfección del exterior antes de reutilizarla. Por último, su diseño transparente cuenta con la ventaja de que la comunicación con otras personas es más fácil y también permite el reconocimiento facial de los dispositivos móviles. Todavía no está a la venta.
C-Face Donut Robotics
A diferencia de los modelos anteriores, este dispositivo no protege al usuario contra el contagio del virus, y por ello es imprescindible utilizarla con una mascarilla quirúrgica o higiénica debajo. Ha sido diseñado con la idea de mejorar la comunicación entre personas de todo el mundo: es capaz de traducir conversaciones a nueve idiomas diferentes (inglés, francés, mandarín, tailandés, coreano, español, ruso, vietnamita e indonesio). Para ello, se conecta al móvil a través de Bluetooth y muestra en texto lo que dice la otra persona. Cuenta con la posibilidad de conectarse a la Red, realizar llamadas, subir o bajar el volumen de la voz y grabar sonido.
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