Con el verano a la vuelta de la esquina, las piscinas y los baños en la playa se convierten en una de las actividades más cotidianas. Y uno de los accidentes más comunes es que el móvil se caiga al agua o que cualquier líquido se derrame sobre él, haciendo que deje de funcionar momentáneamente. Si esto sucede, hay varias soluciones que llevar a cabo y que pueden hacer que tu dispositivo vuelva a funcionar de nuevo. Te contamos algunas de ellas. 

¿Agua normal o salada?

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Móvil Al Agua
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Cuando hay un ‘accidente acuático’ en la playa es importante actuar rápido para evitar que la sal presente en este agua provoque corrosión. Por ello, se aconseja sumergir el teléfono de manera inmediata en un poco de agua mineral para eliminar los restos de sal. 

Apagar el móvil de inmediato

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Uno de los primeros pasos a realizar es apagar el teléfono lo antes posible y colocarlo en posición vertical. En este momento también es importante extraer la tarjeta SIM y la tarjeta de memoria, si se cuenta con una en su interior, para evitar que se dañen con el agua. 

La técnica del arroz 

Una de las soluciones más populares (y en muchas ocasiones efectiva) es introducirlo en arroz. Esto se debe a que el cereal tiene partículas higroscópicas que le permiten absorber la humedad. Para que actúe de la mejor manera hay que desmontar todo lo que se pueda del teléfono: carcasas, batería… Y enterrarlo en arroz un máximo de dos días para que actúe. Otros productos, como la avena, el gel de sílice e, incluso, la arena para gatos también se utilizan para extraer la humedad. 

Buscar alcohol en el botiquín

Otro método para salvar un móvil mojado es el alcohol isopropílico, un tipo de alcohol con un alto nivel de pureza y que solemos tener en los botiquines de emergencia. Esta solución es recomendable principalmente para móviles a los que se les pueda extraer la batería y consiste en introducir el teléfono en alcohol, dejarlo actuar unos minutos y extraerlo hasta que este se haya evaporado por completo. 

Mejor prevenir que curar

La prevención es la mejor medida para tratar de impedir este percance que puede traer muchos quebraderos de cabeza. Para ello, una idea es utilizar fundas impermeables cuando se vaya a la piscina o a la playa. Tener el móvil dentro de una de ellas no significa que se pueda bucear con él colgado del cuello pero sí es aconsejable utilizarla para protegerlo de salpicaduras o de una sumersión rápida. 

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Lucía García López

Periodista, redactora y feminista. Me gusta el cine, la música, el arte y la política. Aprendiendo día a día. Convencida de que la cultura es la mejor arma de transformación

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