Probamos la tablet realme Pad Mini, pequeña y asequible
Con una pantalla de 8,7 pulgadas y resolución HD, funciona con Android 11 y ofrece una autonomía sobresaliente. La hemos probado.
Parece que, poco a poco, vuelven a ponerse ‘de moda’ las tablets pequeñas: hasta hace no mucho casi habían desaparecido en favor de los modelos de alrededor de 10 pulgadas. Y, a día de hoy, hay disponibles modelos como el popularísimo iPad Mini (7,9 pulgadas), la Samsung Galaxy A7 Lite (8,7 pulgadas) o esta realme Pad Mini, dotada de una pantalla de 8,7 pulgadas y que funciona con sistema operativo Android.
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Lo bueno
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Una de sus características más llamativas es su diseño, muy sólido y bien acabado; sorprende teniendo en cuenta su rango de precio. De hecho, su carcasa está fabricada en una única pieza de aluminio y disponible en dos colores: el azul es muy bonito y no deja marcadas las huellas de los dedos.
Todos sus bordes están redondeados, tanto por delante como por detrás, lo que ayuda además a que el agarre sea muy cómodo con una sola mano.
En el apartado de sus prestaciones más destacables está también su sonido, con un sistema de dos altavoces estéreo que no se bloquean cuando se sujeta la tablet con ambas manos en formato horizontal y suenan con potencia y nitidez. Y a nivel de conectividad, se carga por USB tipo C e incluye, además, Bluetooth 5.0, Wi-Fi 5 y una versión con 4G.
Además, con una batería de 6400 mAh y una buena gestión del gasto energético, podemos estar varios días sin cargarla: tiene una autonomía de unas 9-10 horas de pantalla encendida. Luego, como la carga se realiza a 18W con el cargador incluido, se completa en menos de 2 horas.
Con aprobado
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La cámara trasera de la realme Pad Mini cuenta con una resolución de 8 megapíxeles y apertura f2.0, suficiente para alguna foto esporádica —no es tampoco la ‘tarea’ de una tablet—; mientras, la frontal tiene 5 megapíxeles y apertura f2.2 que permite realizar videoconferencias sin mayores inconvenientes.
Aunque cuenta con una capa de personalización (realmeUI) sobre Android, es muy muy ligera, y lo que por un lado significa que se trata de una instalación muy limpia, por otro supone que no ofrece grandes añadidos que ayuden a sacar más partido de la tablet ni se ha optimizado para ella.
Lo no tan bueno
Como avanzábamos, realme Pad Mini cuenta con una pantalla de 8,7 pulgadas que, en esta ocasión, ofrece resolución HD+ (1.380 x 800 píxeles). Así que mientras el sonido sí es adecuado, en las imágenes nos encontramos con una calidad muy ajustada que se nota sobre todo en los vídeos y en grandes cantidades de texto. Es decir, no supondrá gran problema para navegar, consultar redes sociales…, pero sí cuando lo que se desea es, por ejemplo, ver una película o leer un libro.
Está también un poco relacionado con su potencia, ya que con una configuración de 3 GB de RAM (hay una versión con 2 GB) y un procesador Unisoc T616 a 2 GHz (GPU Mali G57 MP1), no se le puede exigir demasiado. realme Pad Mini funciona bien en navegación o reproduciendo contenidos, pero se atasca un poco en los juegos o en el multitarea.
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Sobre el autor
Laura Pajuelo
Periodista amante de las nuevas tecnologías. Me encanta explorar cómo las TIC pueden convertirse en la mejor herramienta para lograr el (necesario) cambio educativo.
