¿Qué papel jugará el metaverso en la educación? Esta es la pregunta que se ha hecho un grupo de investigación de la Universidad de Granada que, bajo la coordinación de Fernando Trujillo, quiere conocer cuáles son los factores que condicionan el uso y la aceptación de este concepto en contextos de educación formal. Para ello, desean contar con la opinión de docentes y estudiantes que, por medio de un cuestionario, podrán expresar su opinión acerca de estos mundos virtuales.
El potencial del metaverso
Aunque de momento la existencia de metaversos exclusivamente educativos es residual, hay iniciativas que ya gozan de una gran popularidad. “El metaverso se encuentra aún lejos de la realidad de los centros educativos, aunque no tanto de los docentes (que conocen el concepto a través de algunas experiencias innovadoras o, fundamentalmente, los medios de comunicación o el cine) o, sobre todo, de los adolescentes y jóvenes, que sí se han acercado al metaverso a través de los videojuegos”, afirma Trujillo. Y precisamente debido a que se trata de un concepto que se encuentra en un estado de desarrollo tan incipiente (y, sobre todo, con pocas experiencias prácticas reales), todavía hay escasas evidencias científicas del impacto de su uso desde el punto de vista psicológico, pedagógico y de aprendizaje. De hecho, la mayoría están relacionadas con los propios beneficios del aprendizaje inmersivo: aumento de la motivación, implicación en el proceso de aprendizaje, mejor asimilación del conocimiento, estímulo de la creatividad, lograr una mejor conciencia de uno mismo… y, por supuesto, la posibilidad de vivir los contenidos en primera persona.
Y esta capacidad para el aprendizaje experiencial ayudará a aprender mejor y más rápido, tal y como recoge un reciente estudio de PwC, que concluye que los estudiantes se muestran un 275% más confiados a la hora de poner en práctica las competencias adquiridas, están cuatro veces más concentrados que con métodos tradicionales de eLearning y 3,75 veces más conectados emocionalmente a los contenidos que los que van a clases presenciales.