Probamos el convertible Microsoft Surface Pro 6
Ultraportátil, rápido y potente. Así es el nuevo dispositivo convertible de Microsoft pensado para el entorno educativo.
Microsoft Surface Pro 6 es un dispositivo a medio camino entre una tableta y un portátil que se adapta perfectamente al entorno educativo gracias a características como su peso ligero (es inferior al kilogramo), a la autonomía de su batería o a una potente configuración que permite desenvolverse cómodamente si hay que trabajar con distintos documentos (Word, PowerPoint, Excel…) o consultar un vídeo como complemento al temario que explica el profesor, entre otras tareas.
Índice de contenidos
La tableta
Anuncio
El elemento principal es una pantalla de 12,3 pulgadas multitáctil, con una resolución de 2.736 x 1.824 píxeles y que soporta el toque de hasta 10 puntos sobre su superficie, lo que significa que varios estudiantes pueden interactuar a la vez con ella.
Con unas dimensiones de 292 x 201 x 85 mm, llama la atención lo ligera que resulta, ya que posee un peso de 770 gr. Asimismo, su acabado garantiza un buen agarre para que transportarla en los desplazamientos sea mucho más seguro.
Como suele ser habitual en los equipos Surface, en su parte trasera cuenta con un soporte que permite situar la pantalla en vertical de forma segura, adaptándose en distintos ángulos en función de las necesidades que el profesorado o los alumnos tengan a la hora de utilizarla para navegar por Internet, consultar el correo electrónico, estudiar, completar un ejercicio, subir un documento a la nube, manejar las herramientas de Office 365 o visualizar un vídeo.
Una funda teclado para convertirse en portátil
Anuncio
Para poder emplearla como un portátil, es necesario emplear la funda-teclado Signature que se adquiere por separado. Ha sido fabricada con Alcántara, un tejido aterciopelado y suave al tacto que además es resistente a los derrames de líquidos.
Este accesorio tiene, por otro lado, un tamaño compacto en el que están presentes todas las teclas habituales, solo que un poco más pequeñas que un teclado normal: tras un breve periodo de adaptación es posible escribir con soltura. Ofrece, asimismo, retroiluminación por LED y el trackpad es de cristal.
En las clases donde es habitual tomar notas o realizar bocetos, por ejemplo, resultará útil un complemento más que tampoco está incluido con la tableta pero que merece la pena. Es el lápiz digital Surface Pen, para escribir sobre la pantalla de forma óptima e incluso borrar textos con la goma que tiene en uno de sus extremos.
Por dentro
Su potente configuración le permite desenvolverse cómodamente en las tareas habituales del día a día en el aula. De hecho, esta es la Surface Pro más potente que ha desarrollado Microsoft hasta la fecha y en comparación a su versión anterior es un 67% más rápida. Además, el rendimiento también se ha mejorado al integrar un procesador perteneciente a la octava generación Intel Core (es posible elegir entre los modelo i5-8250U e i7-8650U). Como la batería dura hasta 13,5 horas, soporta una jornada de trabajo normal.
La configuración de la tableta convertible Microsoft Surface Pro 6 incluye, en otro orden de cosas, una unidad de almacenamiento SSD ampliable a 1 Terabyte para que la capacidad a la hora de almacenar lo ficheros no sea un problema. También integra una cámara frontal de 5 megapíxeles de resolución con vídeo HD y otra posterior con enfoque automático de 8 megapíxeles y vídeo Full HD. El audio es Dolby Audio Premium, por lo que la calidad sonora queda asegurada.
En cuanto a las conexiones, incorpora (entre otras) un puerto USB 3.0, Mini DisplayPort y otro para la funda con teclado que antes se ha comentado. El sistema operativo es Windows 10 y soporta Microsoft Cortana, un asistente virtual que responde a las preguntas que le realizan y que sirve también para establecer recordatorios.
Sobre el autor
Regina de Miguel
Mandela dijo: “La educación es el arma más poderosa que existe para cambiar el mundo”. Ilusionada de formar parte de un proyecto que sí quiere cambiar las cosas y con el que descubro experiencias que no dejan de sorprenderme.
