El Día Mundial de los Docentes tiene como objetivo crear y movilizar una red de apoyo para docentes de todo el mundo. Como directivo de una empresa tecnológica, he observado en primera persona el beneficio de que las empresas formen parte de esa red, reuniendo a profesionales del sector y educadores para ayudar a que las mujeres jóvenes y las niñas se entusiasmen con las carreras de ciencias, tecnología, ingeniería o matemáticas, o STEM como se conoce por sus siglas en inglés.
Pero la realidad es que nos queda aún un largo camino a recorrer. En Europa, solo 29 de cada 1.000 mujeres graduadas en 2015 tenían un título en Informática y de éstas, únicamente cuatro desarrollaron una carrera profesional en tecnologías de la información y las comunicaciones (TIC).
Por esta razón, en este Día Mundial de los Docentes mi reflexión se centra en cómo las empresas pueden (y deben) invertir sus recursos en apoyar a los profesores a derribar para todos las barreras STEM.
Aprovechando al máximo nuestro potencial: la brecha de género
El Índice Global de Capital Humano de 2017 del Foro Económico Mundial expone que, de media, el mundo solo ha desarrollado el 62% de su capital. Por decirlo de otra manera, estamos desaprovechando el 38% de nuestro talento colectivo. Como era previsible, los países en lo más alto del ranking son aquellos que priorizan la educación.
Asegurar que cada persona tenga la oportunidad de desarrollar su potencial es fundamental para reducir ese fondo de talento no utilizado, pero uno de los grandes retos sigue siendo cerrar la brecha de género.
La regularidad con la que el Índice de Capital Humano apunta a una brecha de género en el mercado laboral dentro de esos países que se encuentran más abajo en la clasificación muestra la importancia de la igualdad de oportunidades a este respecto. Y en ninguna parte la brecha de género es más pronunciada que en los campos relacionados con STEM, con el sector de software y los servicios TI encabezando la lista junto a los de industria, energía y minería.
A pesar de la gran demanda en profesionales TI, las mujeres representan solo el 3% de los graduados en TIC a nivel mundial. La clave para solventar este déficit es trabajar las materias STEM con las niñas desde etapas tempranas para reducir los estereotipos de género y mostrarles el valor de estas carreras. Juntos, educadores y empresas, tienen un papel que desempeñar para lograr estos tres objetivos.
¿Cómo pueden ayudar las empresas?
-Modelos femeninos a seguir
En el Reino Unido, un estudio reciente reveló que un 20% más de niñas podían verse a sí mismas haciendo un trabajo en STEM cuando tenían un modelo a seguir frente a las que no lo tenían. Ver y observar a las mujeres que trabajan y destacan en ciencias, tecnología, ingeniería o matemáticas, aporta una motivación y una confianza extra a las niñas para que sigan sus pasos. Los responsables de las empresas deben apoyar y animar a su personal a tomar parte en actividades con estudiantes a través de iniciativas como el proyecto People Like Me, que forma parte de la campaña WISE.
-Colaboración con profesores e instituciones educativas
Las empresas deben ser proactivas dando a conocer las carreras STEM en escuelas y universidades, así como la diversidad de caminos para llegar a ellas. En CA Technologies éste ha sido un punto clave. La Academia de Embajadores STEM permite a los docentes conocer mejor cuáles son las habilidades necesarias en una amplia variedad de carreras tecnológicas y les ayuda a descubrir su propio sesgo inconsciente.
-Eliminar barreras en la sala de juntas
En la Unión Europea, solo el 20% de las mujeres de 30 años o más que poseen títulos relacionados con las TIC permanece en el sector. Las empresas deben examinar sus propias estructuras organizativas y culturales para determinar cómo mejorar la paridad de género en sus plantillas y, particularmente, en los equipos directivos y ejecutivos, allanando el camino para que existan más modelos femeninos a seguir en la industria.
Todos los días son días de escuela
Para que haya más chicas interesadas en STEM, la responsabilidad no puede acabar en los maestros. Las empresas tienen la oportunidad de crear una plantilla futura que sea inclusiva y altamente cualificada para aprovechar las oportunidades de la transformación digital. De hecho, se estima que cerrar la brecha de género en STEM en Europa contribuiría con 820 mil millones de euros adicionales a la economía de la UE en el año 2050.
A nivel mundial, para aprovechar todo nuestro potencial en las economías centradas en la tecnología y reducir cualquier impacto negativo de la disrupción digital, las empresas deberían poner la mejora del acceso a las materias STEM entre las prioridades de su agenda. Esto debería reforzarse con el compromiso de continuar ofreciendo formación para ampliar conocimientos o prepararse para nuevos trabajos, además de derribar las barreras para las mujeres en el lugar de trabajo.
