La plataforma virtual Luca sintetiza ideas para producir contenidos que motiven a los alumnos y promuevan el aprendizaje del currículum oficial. Lo explica Carlos Becerril Romo, Head of Learning en Luca.
Basada en el microlearning, una metodología disruptiva de clases de 5 minutos, Luca se apoya en la narrativa y en la curiosidad para captar la atención y desarrollar la motivación intrínseca de los menores de los últimos cursos de Primaria y Bachillerato. Su objetivo es democratizar la educación con innovadoras técnicas de aprendizaje y tecnologías educativas: diversificar la manera en la que los docentes y familias interactúan con las nuevas generaciones y la manera en la que se motivan de forma natural.
Los adultos y educadores pierden de vista algunos de los principios fundamentales sobre la motivación humana; suelen olvidar que todas las personas tienen inclinaciones naturales hacia determinados temas y actividades, mientras que otros les resultan poco relevantes o complejos. Los estudiantes tienen ciertas actividades preferidas y otras que no les agradan: a algunos les gusta más leer que dibujar; otros se divierten jugando al fútbol, mientras que algunos esperan impacientes la clase de baile.
De manera natural, las actividades y temas que les interesan favorecen su motivación intrínseca, aquella que surge desde el interior, sin que nadie o nada la solicite y sin que haya una recompensa extra, más que el gusto de realizarla. En el otro extremo se halla la motivación extrínseca: aquella que les lleva a actuar porque deben o tienen que hacer algo, ya sea porque alguien lo requiere o porque existe una recompensa indirecta al realizar la actividad. Pero ¿cómo transitar de una motivación extrínseca a una intrínseca con contenidos y actividades predeterminadas por los docentes y el currículum oficial?
Luca pretende recuperar esa motivación intrínseca utilizando una metodología de microaprendizaje centrada en fragmentar un tema en pequeñas píldoras de conocimiento que permite a los niños aprender en poco tiempo. El maestro entrega estos ‘mini aprendizajes’ a los alumnos en el momento preciso de la clase, de modo que pueden interactuar con estas ráfagas de contenidos específicos. Como resultado, las lecciones son mucho más fáciles de digerir y aumenta la probabilidad de retención de conocimientos.
Aunque no se puede promover la motivación intrínseca en los estudiantes, sí es posible encontrar la manera de presentar los contenidos y actividades de tal forma que resulten significativos en la vida diaria y despierten así sus intereses. Por ejemplo, Luca también favorece la repetición espaciada: un método de revisión del material educativo en intervalos sistemáticos. Los profesores pueden ofrecer el aprendizaje y alternar los intervalos de tiempo antes de repetir el contenido, comenzando con intervalos muy próximos entre sí y, poco a poco, haciendo intervalos sistemáticamente más largos. De este modo, aumenta el índice de absorción del conocimiento, lo que puede servir para mejorar la capacidad de retención de lo que se estudia.
Además, las lecciones de Luca están basadas en el currículo oficial de aprendizaje de cada país, lo que permite ofrecer el mismo contenido educativo programado en las escuelas, a través de una metodología diferente. La solución hace uso de avances tecnológicos especializados en la transmisión de la información para hacer llegar de manera efectiva la lección al alumno.
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