Esta es una de las funcionalidades que ofrece la plataforma Mathew que, además, permite que cada estudiante avance a su propio ritmo, mientras el docente dispone de herramientas para acompañarlo de manera personalizada.
Con poco más de año y medio en el mercado, la plataforma Mathew ha contribuido a personalizar el proceso de enseñanza y aprendizaje de más de 50.000 estudiantes y docentes en más de un centenar de centros educativos, adaptándose a las necesidades específicas de cada institución. Y es que gracias a la inteligencia artificial, este asistente educativo proporciona un aprendizaje adaptativo, facilitando que integren su uso en entornos analógicos, digitales o híbridos.
Con funcionalidades que abarcan desde la creación de contenido curricular hasta la evaluación formativa con retroalimentación y el acompañamiento a los estudiantes, Mathew asistente educativo se posiciona como un aliado clave para personalizar la educación, adaptándose a cualquier asignatura y nivel educativo, desde Infantil hasta Bachillerato o Formación Profesional.
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El asistente transforma los retos pedagógicos en oportunidades de innovación educativa. Así, su capacidad para corregir y para evaluar automáticamente trabajos escritos a mano con precisión y eficiencia libera de tiempo al profesorado, que puede enfocarse en la enseñanza personalizada; mientras el alumnado desarrolla sus tareas en formato tradicional, asistido por la IA.
La plataforma también facilita la adaptación del currículo a las necesidades individuales de cada estudiante, ofreciendo recomendaciones específicas y una atención individualizada. Las nuevas integraciones con plataformas líderes como Google, Microsoft y Moodle garantizan una experiencia digital fluida y una gestión académica eficaz.
Los centros educativos y sus docentes tienen el control total sobre el contenido. La IA de Mathew funciona en un entorno cerrado, sin acceso a Internet, y todo el contenido está supervisado por el centro de enseñanza. Cumple con la normativa de IA europea y con la RGPD (Reglamento General de Protección de Datos), garantizando la privacidad y la seguridad.
Mathew asistente educativo acompaña a los centros, de manera personalizada, en la implementación de la plataforma y durante todo su uso. “Con una filosofía centrada en la mejora continua, nos adaptamos a las necesidades específicas de cada institución. Es la solución indispensable para cualquier centro que quiera innovar y optimizar la experiencia educativa”, destaca Alan Fusté, CEO de Mathew.
(Este contenido ha sido elaborado en colaboración con Mathew)
