Por qué es importante hablar del medioambiente en el aula

Con motivo de la celebración de la COP25 en Madrid, recopilamos algunos de los temas centrales de la Cumbre que se pueden abordar en clase.
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Pancarta De Una Protesta Climática. No Hay Planeta B

El estudio ‘Entendiendo a la Generación Alfa’, elaborado por la agencia de comunicación Hotwire, ha revelado que el 95% de los nacidos a partir del 2010 están concienciados con el medioambiente, frente al 57% de los millennials y el 37% de los baby boomers. Esta encuesta demuestra el creciente interés de los más jóvenes en los temas relacionados con la ecología, la diversidad o las causas sociales.

De hecho, y siguiendo con el término ‘justicia intergeneracional’, los jóvenes de hoy serán quienes hereden el mundo de mañana, y deberían participar en las decisiones que se toman para luchar contra la crisis climática. De ahí que sea tan importante que estas generaciones reciban una educación medioambiental acorde con la situación actual del planeta. 

Los estudiantes, unidos

Conscientes de ello, se han unido en movimientos como ‘Fridays for Future’, encabezados por la popular adolescente Greta Thunberg, que se preguntan: “¿por qué estudiar para un futuro que quizás no llegue?”. Por eso, estos jóvenes activistas se ponen en huelga y faltan a clase, exigiendo a los políticos de todo el mundo que pongan medidas para hacer frente a los problemas medioambientales con el objetivo de que el planeta siga existiendo. 

No son los únicos: ‘Teachers For Future’, ‘Zero Waste’, o ‘Madres por el clima’ son otros ejemplos de los muchos movimientos sociales que exigen conservar el bienestar y cuidar mejor del planeta. 

Pero, ¿qué ocurre en los centros educativos? Finlandia y Suecia son dos países de referencia en cuanto a educación medioambiental en las aulas, e Italia se acaba de subir al tren de la lucha contra el cambio climático incorporando una asignatura de educación medioambiental obligatoria de una hora semanal dentro del currículo. ¿Cómo está la situación en España? De momento, centros y docentes se están sumando a la lucha contra el cambio climático con proyectos e iniciativas propias, y de momento no hay planes para tomar medidas de forma global. 

Pancarta Que Denuncia La Emisión De Co2 Por Los Intereses De Las Empresas.

Medioambiente en el currículo educativo

Para Ally Vispo, uno de los principales referentes del movimiento ‘Zero Waste’ en España, resulta de vital importancia empezar a educar con perspectiva medioambiental desde la infancia. “Cuando educamos desde edades tempranas, estamos creando personas responsables, cívicas, éticas, concienciadas y compasivas, y un mundo lleno de personas así no puede ir mal”, explica. Y añade que tratar la crisis climática y sus soluciones en clase “enseña a los alumnos el valor de la responsabilidad y a entender que tienen el poder de crear un mundo mejor para todos y todas”. 

Por otro lado, Miriam Leiróos, docente y coordinadora de ‘Teachers For Future’, un colectivo mundial formado por docentes que busca llevar la ‘ecoalfabetización’ a las escuelas y concienciar a los estudiantes sobre el cuidado de la naturaleza, defiende la necesidad de que la educación medioambiental “toque cada área en todas las etapas, pues en cada acción sumamos o restamos por el medioambiente, por lo que no se puede estudiar educación ambiental de forma aislada”. 

La COP25

Para introducir en las aulas temas relacionados con la sostenibilidad, el cambio climático o las necesidades del medioambiente se pueden utilizar todo tipo de recursos, como estos sobre el del agua y su ahorro o estos documentales que pueden ser muy interesantes para que los estudiantes aprendan de otra forma sobre la evolución de la Tierra o el calentamiento global. 

También es posible aprovechar la Cumbre del Clima de 2019, que se celebra entre el 2 y el 13 de diciembre en la capital española. El objetivo de la Conferencia de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático (COP25) es que los países presenten sus compromisos y que logren establecer normas para todos los implicados y, así, hacer efectivo el Acuerdo de París, firmado en 2015 para combatir el cambio climático.

Estos son algunos de los temas que se tratarán en la COP25 y que se pueden abordar en el aula de distintos niveles educativos: 

  • Huella Ecológica: 

La Huella Ecológica es la medida del impacto de las actividades humanas sobre la naturaleza, representada por la superficie necesaria para producir los recursos y absorber los impactos de dicha actividad. Figuras como Greta Thunberg (que viaja a Madrid desde Virginia (EEUU) en catamarán, un medio de transporte no contaminante, para evitar trasladarse en avión) se han convertido en la inspiración y ejemplos a seguir de una generación que aspira con reducir su Huella Ecológica. ¿Saben tus alumnos cuál es la suya? En Internet hay varias herramientas y encuestas gratuitas que pueden rellenar para averiguar qué pueden mejorar en su vida para reducir su propia huella. 

Imagen De Huella Ecológica
  • Calentamiento global: 

El calentamiento global es un aumento de la temperatura media de la atmósfera terrestre y de los océanos. Se calcula que el proceso, que es natural, se ha acelerado desde el siglo XIX por culpa de la acción humana; en particular por la emisión de gases de efecto invernadero que se acumulan en la atmósfera. ¿Qué saben los jóvenes sobre este fenómeno? ¿Qué hábitos tienen a diario que puede afectar para bien o para mal la capa de ozono?

  •  Energía: 

Expertos en la Cumbre defienden que una de las claves para mejorar el estado de la Tierra es empezar por la descarbonización de la energía y que los gobiernos estatales apuesten por las energías renovables. 

  • Consumo responsable: 

El capitalismo y el consumo excesivo tiene sus consecuencias negativas en el medioambiente. El consumo responsable, según ACNUR, se puede definir como la elección de productos y servicios que consumimos de acuerdo con criterios de calidad, precio, impacto ambiental, impacto social y ética de las empresas que los producen.

Lo que se compra (cómo y cuándo, también) tiene, sin duda, un impacto en nuestro entorno. Por ejemplo, muchos no se habrán parado a pensar en cómo influye nuestra dieta en el planeta. Algunos ecologistas piden pasarse a una ‘dieta climática’, que consiste en reducir (que no eliminar) el consumo de carne por lo que contamina el sector ganadero. Pero no sólo es la forma de comer. ¿Se han planteado los alumnos cuánto contamina el proceso de fabricación de una prenda de vestir o del móvil que usan todos los días? 

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