Tras las Pruebas de Acceso a la Universidad (PAU), cientos de miles de estudiantes en España se enfrentan a una de las decisiones más relevantes para su futuro laboral: elegir una carrera y la universidad para cursarla. ¿Cómo diferenciarse para atraer nuevo alumnado? Factores como la madurez digital y la capacidad de ofrecer experiencias con aprendizaje flexible, móviles y personalizadas han ganado terreno al prestigio, la ubicación o las instalaciones; lo que más se valoraba en el pasado. 

Y es que, según el estudio ‘La Situación de la Educación Superior 2025’ elaborado por Instructure, los creadores de Canvas –uno de los sistemas de gestión del aprendizaje más utilizados a nivel global–, el 65% de los estudiantes españoles valora poder estudiar cuándo y desde dónde quiera, y más de la mitad (54%) se muestra bastante o muy dispuesto a considerar en el futuro opciones de universidades con aprendizaje flexible como la enseñanza híbrida, las microcredenciales o los cursos cortos.

Clases híbridas, una opción cada vez más demandada

De hecho, el alumnado ahora busca centros que combinen clases presenciales con opciones online para poder organizar sus estudios de forma más flexible y compatible con otras responsabilidades. En este contexto, las universidades que integran modelos híbridos y plataformas digitales robustas en la nube son las que se posicionan a la vanguardia. “Hoy, más que nunca, es fundamental que las universidades estén preparadas para enseñar de la forma en que se aprende hoy. Eso significa dejar atrás plataformas auto alojadas que solo unos pocos saben manejar, y apostar por herramientas en la nube, fáciles de usar y capaces de ayudar a todo el profesorado a tomar decisiones pedagógicas con datos reales y que facilitan la personalización de la educación”, explica Eumari Bonilla Cartier, directora regional de Instructure en España.

universidades con aprendizaje flexible

Al utilizar los sistemas de gestión de aprendizaje más que como repositorios de contenido y usar estratégicamente la información que proveen sobre el desempeño de cada estudiante, los docentes pueden diseñar rutas de aprendizaje para que cada alumno avance según sus tiempos y necesidades, recibiendo un acompañamiento más personalizado y adaptado a su situación. Y gracias a tecnologías emergentes como la inteligencia artificial, los sistemas de gestión de aprendizaje modernos permiten ofrecer experiencias formativas personalizadas que lo preparan mejor para un mundo laboral en constante cambio, alineando su desarrollo con las demandas reales del mercado.

En esta línea, también es clave que las universidades ofrezcan oportunidades de reskilling y upskilling, es decir, la posibilidad de regresar a la universidad en el futuro para actualizar o adquirir nuevas competencias. Las universidades que ofrecen microcredenciales, formación continua y contenidos accesibles desde cualquier lugar cuentan con una ventaja considerable, especialmente si utilizan tecnología en la nube que les permite colaborar con otras instituciones, reducir las barreras de acceso al conocimiento y ofrecer experiencias educativas más dinámicas.