En un mundo digitalizado y en el que tecnologías como la inteligencia artificial abarcan cada vez más usos y aplicaciones se requieren nuevos roles profesionales capaces de simplificar los procesos de comunicación entre personas y máquinas. Un ejemplo de ello son los expertos en procesamiento del lenguaje natural (PLN), una rama de la inteligencia artificial que se encarga de analizar, comprender y generar los códigos necesarios para crear y desarrollar motores de búsqueda, asistentes virtuales, chatbots y otras aplicaciones que requieran de interacción entre computadoras y seres humanos. Estos especialistas aúnan un perfil humanista (lingüista, filólogo, periodista...) con conocimientos sobre técnicas, métodos y herramientas orientadas al desarrollo de estas tecnologías del lenguaje.

El impacto del Procesamiento del Lenguaje Natural y sus beneficios

PLN/Procesamiento del Lenguaje Natural

Para hacerse a la idea de la importancia de esta figura, también conocida como lingüista computacional, basta con conocer algunas cifras relacionadas con el desarrollo de los asistentes inteligentes de voz: de las 7.000 lenguas que existen en el mundo, Siri tan solo es capaz de comunicarse en 21 idiomas, y Google Translate apenas supera el centenar, siendo la aplicación que más lenguas incluye. Unos datos que corroboran la magnitud de trabajo a la que se enfrentan los profesionales en esta materia. “El caso de los asistentes inteligentes es tan solo un ejemplo del alcance que pueden tener estas tecnologías relacionadas con el lenguaje. Posiblemente, en poco más de diez años, la IA nos traducirá simultáneamente con nuestra voz a cualquier idioma. La creación de este tipo de tecnologías requiere de un trabajo interdisciplinar en el que el papel del lingüista computacional es tan crucial y necesario como el del ingeniero”, como afirma Santiago González-Fuente, director y docente del posgrado de Experto Universitario en Español y Tecnologías del Lenguaje de CIESE-Fundación Comillas. 

Además de su labor en el desarrollo de estos asistentes de voz y otras aplicaciones, contar con un especialista en PLN aporta diferentes ventajas para las empresas:

  • Agilizar y optimizar tareas: ahorra tiempo en actividades que en ocasiones se hacen de manera manual, como la clasificación y la búsqueda de información, permitiendo una gestión más exhaustiva. Al procesar y leer grandes volúmenes de texto de manera automática, también permite el acceso a información más amplia.
  • Análisis de datos: el análisis lingüístico revela información y conclusiones que en ocasiones pasan desapercibidas de otro modo, agregando valor al negocio.
  • Facilita la toma de decisiones: al acceder a un gran volumen de información, es posible detectar problemas con mayor rapidez y eficacia y planificar soluciones específicas.

Cómo formarse en PLN

PLN/Procesamiento del Lenguaje Natural

La creciente demanda de profesionales en este campo ha motivado que se incrementen los graduados en carreras de humanidades (lingüistas, traductores, periodistas, filólogos o hispanistas) que deciden ampliar sus estudios en este sector. Algunas de las opciones disponibles para formarse en PLN son:

  • ‘Experto en Procesamiento del Lenguaje Natural’ de Udima: es una certificación online que prepara para las nuevas profesiones en torno a la inteligencia artificial. Se compone de cuatro asignaturas y se desarrolla durante doce meses con un total de 400 horas lectivas que equivalen a 16 créditos ECTS.
  • Curso online de ‘Tecnologías del lenguaje para lingüistas humanistas’: profundiza en los conocimientos y destrezas que se esperan de los humanistas que actualmente reclama el mercado de la inteligencia artificial. Se imparte durante tres meses y el programa está repartido en 100 horas de estudio. 

Otras salidas para humanistas interesados en la tecnología

Aparte del experto en PLN, la irrupción de la IA traerá consigo otros empleos de nueva creación. Según Adigital, en 2035 estas profesiones supondrán el 30% de las oportunidades laborales y requerirán capacidades diferentes a las actuales. Esta asociación estima, a su vez, que el mercado laboral demandará perfiles de humanidades y de ciencias sociales que reflexionen sobre la nueva realidad digital y ayuden en su regulación, como los expertos en robótica empática, los operadores de robots médicos o los expertos en desarrollos virales.