Charmex El uso de monitores interactivos en los centros aporta múltiples ventajas, tal y como ha puesto de manifiesto Charmex: aportan alta resolución, un nivel de gastos de mantenimiento “cero” de sus instalaciones, y la simplificación de la estructura de componentes asociados al aula digital, ya que se elimina la necesidad de instalar proyector y altavoces. De hecho, Miguel Sánchez, responsable de la división de sistemas interactivos de Charmex, señala que la tendencia apunta a que el mercado de estos dispositivos crecerá en los próximos 5 años entre un 15 y un 18 por ciento anual en España.
Para este experto en sistemas interactivos orientados a entornos educativos, el dispositivo tecnológico con que los centros pedagógicos dotan a cada alumno ya no es tanto un ordenador portátil sino una tableta, “y es que estos elementos sintonizan a la perfección en la compartición de contenido digital con los monitores interactivos, así como con smartphones, consiguiendo que el conjunto participe en las clases de forma colaborativa”.
Aun así, hay razones que frenan el crecimiento de este mercado en España, como son un coste por encima del aula digital “tradicional” y la escasez presupuestaria de muchos centros. Pese a ello, el cambio en la tendencia hacia el uso de este tipo de pantallas interactivas táctiles es una realidad para Charmex, que prepara una oferta avanzada y adecuada a la demanda, con modelos LED y LCD, de tamaños y prestaciones variadas y aplicables a diferentes propósitos.