Unir Programar puede estar al alcance de cualquiera, y muy especialmente de los más pequeños. Es la filosofía que trasmite Jesús Moreno y su equipo al frente de de Programamos, una asociación cuya finalidad es fomentar el desarrollo del pensamiento computacional desde edades tempranas a través de la programación de videojuegos y el desarrollo de aplicaciones para dispositivos móviles. Moreno impartirá a partir del 22 de mayo una serie masterclass con el título ‘Programación informática como herramienta educativa en el aula’, aquí puedes informarte.
¿Cuándo y por qué surge la idea de fundar Programamos?
Es una asociación sin ánimo de lucro cuyo objetivo fundamental es promover el desarrollo del pensamiento computacional desde edades tempranas a través de la programación de videojuegos y aplicaciones para móviles en todas las etapas escolares, desde Educación Infantil hasta Formación Profesional y la Universidad.
Tras varios años trabajando con jóvenes de Secundaria y Bachillerato, nos planteamos la posibilidad de adaptar nuestras prácticas a otros niveles educativos y disciplinas. Así que nos pusimos en contacto con otros docentes y preparamos talleres en varios colegios para evaluar esta posibilidad. Como los resultados de estas actividades fueron magníficos y realmente motivadores, nos decidimos a poner en marcha un sitio web para compartir este tipo de iniciativas.
En nuestro país hay un buen número de docentes que hacen cosas parecidas, pero hasta ahora cada profesor era una pequeña isla. Lo que tratamos de conseguir es tender puentes entre los docentes y actuar como punto de encuentro para unir esfuerzos y tratar de mejorar nuestra práctica diaria.
Os acercáis a un público joven, estudiantes… Por hacer de abogado del diablo, ¿no crees que las generaciones más jóvenes ganan por goleada a las demás? ¿Se puede aprender programación con 40 años?
Aunque tratamos de potenciar el pensamiento computacional desde edades tempranas, también nos dirigimos a docentes y padres que quieran aprender a programar. Y estamos convencidos, porque así lo comprobamos a diario, que las herramientas actuales convierten el proceso de aprender a programar en algo realmente divertido, motivador y satisfactorio para gente de cualquier edad. ¿Se te ocurre un plan más bonito que aprender a programar videojuegos junto a tus hijos?
Masterclass Unir ¿Cuáles son, a tu juicio, las mejores herramientas de programación? ¿Por qué?
Como es natural, en función de los objetivos que uno se marque las herramientas más adecuadas pueden variar. Pero en el caso de personas que quieran aprender a programar, lo ideal es que los lenguajes y herramientas presenten ciertas características que se recogen en la frase “suelo bajo, techo alto y paredes altas”. Es decir, que estas herramientas deben tener una curva de aprendizaje corta, de forma que gente sin apenas conocimientos informáticos pueda comenzar a utilizarlas sin demasiado esfuerzo; que ofrezcan la posibilidad de que personas con motivaciones e intereses muy diversos puedan utilizarlas para expresarse y crear distintos tipos de aplicaciones; y que cuando la gente haya aprendido a programar, pueda seguir utilizándolas para crear aplicaciones complejas y ricas.
Sin duda, desde nuestro punto de vista consideramos que la herramienta Scratch cumple con todos estos requisitos y recomendamos esta solución para aprendices noveles.
¿Qué lectura positiva podemos extraer del aprendizaje temprano en programación? ¿Qué aporta a un estudiante de Infantil y de Primaria?
En Programamos estamos convencidos de que en el futuro más próximo será necesario saber programar en una gran cantidad de sectores, y no solo en el sector IT, por lo que consideramos que enseñar a nuestros estudiantes a programar puede ser un factor muy importante en su futuro y en el de nuestra sociedad. Pero además existen evidencias científicas de que aprender a programar en edades tempranas no sólo prepara a los jóvenes para estudios y profesiones técnicas, sino que los ayuda a desarrollarse como pensadores computacionales que pueden aprovechar estos conocimientos y destrezas en muchos aspectos de sus vidas, potenciando así su creatividad y su capacidad de innovación y emprendimiento.
El profesor ha de jugar un papel muy importante a la hora de guiar a su alumno en programación informática. ¿Cuál ha de ser la actitud del adulto ante un niño que se enfrenta a un ordenador?
Ante todo, el docente debe sentirse cómodo con la tecnología para poder disfrutar del proceso de enseñanza. Por consiguiente, iniciativas como las de UNIR que ofrecen una formación flexible y de calidad al alcance de docentes, padres y estudiantes de ciencias de educación nos parecen fundamentales. En nuestro país contamos con un profesorado muy bien preparado y que es innovador y creativo, por lo que una vez que hayan recibido una formación inicial suficiente, se sentirán cómodos y seguros y podrán, en consecuencia, desarrollar sus propias iniciativas con imaginación y creatividad para incorporar a su práctica diaria este tipo de enseñanzas y metodologías.
Cuéntanos qué podemos encontrar en vuestra página y hacia dónde estáis trabajando en estos momentos.
En nuestra plataforma se explican las motivaciones de este proyecto y sus objetivos, se incorpora información que pretende ayudar a docentes noveles en estas tecnologías a plantear esta iniciativa en su aula y se cuelgan todos los materiales educativos que utilizamos en nuestras clases. Además, hay un blog en el que se comparten de forma más cercana nuestras experiencias e ideas, y con una sección de foros, en la que cualquiera puede plantear dudas o sugerencias, contar sus propias experiencias, compartir con la comunidad nuevas herramientas, etc. Por supuesto, todos los materiales y recursos se comparten con una licencia que permite que cualquier pueda usarlos, modificarlos o adaptarlos a su gusto, ya que desde Programamos tratamos de inculcar a nuestro alumnado los valores de la cultura y el software libre.
En relación al futuro, desde hace unos meses varias administraciones educativas se han puesto en contacto con nosotros para que les presentemos nuestro proyecto y les planteemos ideas para ayudar a extender esta práctica por los centros escolares de nuestro país, por lo que somos muy optimistas de cara a las posibilidades de expansión de este tipo de enseñanzas.