Sergio García, profesor de CSEU La Salle, en Madrid, acudió a Londres a la presentación del nuevo software SMART amp, que se encuentra alojado en la nube. Él mismo nos cuenta qué aporta esta solución al aula y cuáles fueron sus impresiones.

SMART amp es una apuesta por la evolución lógica de los programas de pizarras digitales hacia un entorno de aprendizaje más completo que incluya el uso de dispositivos móviles en el aula y algunas metodologías como, por ejemplo, el trabajo colaborativo.

SMART amp

Se trata de un nexo que no sólo une dispositivos dispares como tabletas, teléfonos móviles y ordenadores de distintos sistemas, sino también metodologías como la tradicional y la colaborativa, así como otros elementos como las PDIs. SMART amp ofrece a los alumnos una colaboración en tiempo real, siempre controlada y supervisada por el profesor, que les permite conectarse a espacios de trabajo virtuales y privados donde los grupos pueden ir gestando el gran espacio virtual del aula. A su vez, el docente puede insertar en este espacio sus propios materiales de aprendizaje, software de la pizarra digital o incluso evaluaciones en tiempo real.
Una de sus principales ventajas es que trabaja en la nube de Google por lo que plantea un escenario de uso de la tecnología adaptado a cada alumno. Además, con SMART amp ya no es necesario que en una clase los alumnos dispongan del mismo dispositivo, ya que su funcionamiento está asegurado al estar basado en HTML 5. Igualmente, para entornos BYOD esto supone un salto cualitativo que lo hace posible. También permite que la pizarra digital ya no sea una versión moderna del encerado verde, sino que la convierte en el centro neurálgico de la colaboración entre pares en un aula.

También para evaluar

Además de las grandes posibilidades de colaboración, destaca su capacidad para evaluar. Con SMART amp, el profesor puede lanzar preguntas en tiempo real para que los alumnos contesten desde sus dispositivos. Esto permite mezclar de una forma acertada las evaluaciones finales de clase con preguntas sobre la evolución de la lección, lo que posibilita que se incremente el control del aprendizaje de sus alumnos por parte del docente.

En resumen, esta solución es un gran paso para poder avanzar en el software colaborativo donde la PDI toma un nuevo protagonismo más allá de para exponer presentaciones o actividades de libros digitales. Asimismo, otorga a los dispositivos móviles de los alumnos un rol que les convierte en algo más que meros libros electrónicos, mostrándose así como tecnologías de investigación, colaboración y creación de contenido grupal.

El único inconveniente de este software quizás sea la reticencia de muchos docentes a cambiar su forma de enseñar. Desde mi punto de vista esta solución parte de una concepción muy avanzada de las TIC optando por un programa muy fácil de utilizar pero que implica, para sacarle todo su jugo, dar clase desde una metodología distinta a la tradicional. Esto puede hacer posible que muchos docentes se vean en la tesitura de tener que cambiar su forma de dar clases. Esto sería un gran paso en la educación, poner fin a las clases dirigidas y magistrales para adoptar la colaboración como manera de enseñar y aprender.